SINOPSIS
Jay (Kodi Smit-McPhee) es un joven aristócrata escocés que, en pleno
siglo XIX, llega al viejo Oeste americano para emprender un viaje que le
permita reunirse con la mujer que ama. En el camino se cruza con un
misterioso y tramposo forajido (Michael Fassbender), que se ofrece a
acompañarle en su aventura.
Cuando vi el trailer de esta película, hubo varias cosas que hizo que me apeteciera ver esta película. Y las razones fueron sus protagonistas, entre ellos estaban Michael Fassbender y dándole la replica como villano el gran Ben Mendelsohn. Dos actores que todo lo que hacen, lo hacen bien(lo de Fassbender ya es para hacerlo patrimonio de la humanidad) y sobre todo una preciosa fotografía con los paisajes de Nueva Zelanda como escenario. No es Slow West un western típico, sino que al ser una película independiente, su tono minimalista(apenas hay un par de escenarios, lo demás es el viaje entre los protagonistas) pega totalmente con la historia que se nos está contando. Ese protagonista enamorado que recorrerá el viejo Oeste para encontrarse con la mujer que quiere, sin que sepa que sobre ella hay una recompensa de 2000 dolares. Es una película fantástica porque aunque tiene sus ramalazos de violencia, lo que importa es como todas las acciones repercuten en los personajes(como la escena en la tienda, sencillamente brutal) o el climax final donde un error puede matar a alguien inocente, o como la persona inocente tendrá que matar para salir con vida.
Es sobre todo, una película sobre la extraña amistad que surgirá entre el protagonista y ese pistolero de nombre Silas interpretado por Michael Fassbender. Su primera aparición en pantalla es puro Eastwood(empuñando un revolver, con la cara tapada para luego encenderse un puro) y su personaje, es alguien tan carismático que cuando el no aparece el ritmo del film decae. No porque lo que venga a continuación sea aburrido o carece de interés, pero Fassbender es demasiado bueno en lo que hace como para querer que aparezca en todos los planos del film. Y como decía antes, Ben Medelsohn le da un toque interesante al film, dándole la amenaza que la película necesita junto con el personaje del cazarecompensas que viste de negro
También hay momentos para la comedia negra, como la imagen que tenemos encima de este párrafo para prepararnos para el desenlace brutal. En definitiva, una gran película independiente, que aunque no ha tenido demasiado éxito en su recorrido comercial, demuestra que cuando alguien(aunque sea su opera prima, como es este caso) se acerca con cariño a un genero como el western, pueden salir grandes películas.
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